20 Jun El desarrollo cognitivo en la adolescencia
El desarrollo cognitivo en la adolescencia es uno de los aspectos más importantes en los que pueden influir los padres/tutores. La capacidad intelectual va madurando con el paso del tiempo. Van aprendiendo cómo es el mundo y se van construyendo una imagen de sí mismos. Como bien sabemos, el tránsito de la infancia a la adolescencia no es fácil y es aquí donde se producen muchos de los cambios que marcarán la personalidad del joven.
Este periodo es cada vez más complejo debido a las incesantes exigencias que marca la sociedad: más habilidades sociales, más destreza física e intelectual y una mayor adaptación a los cambios que hay que afrontar individualmente. Si durante toda la infancia, la educación que le han proporcionado familia y escuela no ha ido encaminada a fomentar estas habilidades, el adolescente puede tener problemas de adaptación considerables.
El niño durante todo su proceso de crecimiento se desarrolla buscando su propia identidad, estableciendo vínculos emocionales, expresando sus sentimientos y estableciendo relaciones emocionales de todo tipo.
¿Por qué los adolescentes sufren crisis existenciales?
Todos los jóvenes deben atravesar la crisis de la adolescencia con mayor o menor intensidad. Esta va acompañada de un sentimiento de vacío que intentan llenar. En esta etapa hay que estar muy atento a los comportamientos de los adolescentes, ya que pueden llenar ese vacío con prácticas poco recomendables como buscar diversión junto con el consumo de drogas o alcohol, consumismo compulsivo, etc.
La crisis vital del adolescente forma parte de su desarrollo cognitivo y podríamos afirmar que es la primera gran crisis vital de la persona. Es la crisis de la identidad. Es una etapa muy frágil a nivel mental en la que el adolescente vive una situación de gran riesgo para los trastornos psicológicos.
Cuando el joven ha completado su desarrollo cognitivo se presentan las siguientes características:
- El adolescente es capaz de elaborar un pensamiento abstracto y mantener una actitud crítica y reflexiva ante el mundo y las experiencias vividas. El pensamiento simbólico no es su fuerte y utiliza, como en etapas anteriores, la intuición o los pensamientos mágicos como cuando era niño.
- Tiene una imaginación desbordante y tiende a la ensoñación. Sus pensamientos se centran en todo aquello que desea y no tiene.
- La capacidad memorística está ligada a sus emociones, recuerda y aprende lo que le interesa y motiva.
- Puede comprender conceptos muy abstractos artísticos, metafísicos o filosóficos.
- La resolución de problemas cada vez está más desarrollada, utiliza la experiencia previa para buscar soluciones.
En Celebro, planteamos un taller que trata de dar herramientas a padres y tutores que fomenten la comprensión, la escucha activa así como la construcción de identidad y la mejora de las relaciones afectivas con los adolescentes.